19 noviembre, 2009

Saga de Batman VI: El Caballero Oscuro

Condenada a Ser de Culto

Tras el moderado exito de Batman Begins, se autorizó la secuela que devolviera a la franquicia las cotas de popularidad de antaño, repitiendo el mismo equipo que la anterior: Nolan dirigiendo, con Bale como Batman, Freeman como Lucius Fox, Caine como Alfred y Oldman como Gordon. La sosa Maggie Gyllenhaal sustituye a la sosa Katie Holmes como la sosa Rachel Dawes. Las novedades en el reparto vienen por la parte de los villanos. Aaron Eckhart lo borda como Harvey Dent - Dos Caras y Heath Ledger, se convierte en el amo de la función con su encarnación del Joker. En esto se basa lo mejor de la película, en un reparto absolutamente impecable.

No estoy de acuerdo con los que califican esta película como una obra maestra del cine, ni con los que la descalifican completamente diciendo que no es una cinta de Batman, sino un James Bond con mascara. Me sitúo mas en un punto intermedio. Me parece una buena película, lastrada por un metraje excesivo, quizás un final con el Joker entre rejas y Dos Caras en el hospital, sin el circense giro de la última media hora y sin toda la vergonzante subtrama de los dos ferry hubiera culminado una película redonda.

Pese a todo, en mi opinión, Nolan ha cogido muy bien el punto a los personajes y ambientes del universo Batman. Muy cercano al "Year One" de Miller, algo que ya hacia en "Begins" Esto se nota, especialmente en el Comisario Gordon. Tambien Bale demuestra ser el unico de los actores que ha encarnado al murcielago capaz de entender la dualidad Wayne, Batman (¿Ves Keaton? Wayne No es Clark Kent)


Al margen de sus indudables valores cinematograficos como cinta de acción y aventuras, su promoción se vio ayudada por la inquietante interpretación de Ledger, su muerte antes del estreno y su Oscar póstumo. Lo que fueron ingredientes finales para convertirla en una obra de culto

Saludos

OSO170 (¿Why so serious?)

1 comentario:

Tomi Soprano dijo...

Un peliculón como la copa de un pino. Una de mis favoritas, sin lugar a dudas.