1977 Llegamos a la cúspide de la etapa Moore como 007. Peliculón de regalo. El director Lewis Gilbert nos obsequia con una cinta que prescinde de los errores de las 2 cintas anteriores de Moore, pero incide en sus aciertos. Con un ritmo trepidante y sostenido recuerda las virtudes de “James Bond contra Goldfinger” Volvemos a tener un millonario megalómano, un sicario de lujo y un plan terrible. Moore interpreta a un Bond divertido, irónico, incluso en los peores momentos y eso le da mucha frescura a sus películas. La chica Bond de turno no es un florero, como lo fue Ms. Goodnight en la entrega anterior.
OSO170 (Amarillo, el submarino es)
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